
Los sistemas automáticos de inversión son los favoritos de aquellos inversores con un perfil informático muy patente, puesto que con buen criterio, intentando aprovechar sus conocimientos de programación, persiguen un sistema que lo haga todo, marque las entradas, los stops, las salidas, vamos, poner el sistema a trabajar para nosotros y nosotros a otra cosa mariposa.
Los sistemas manuales son todo lo contrario, y habitualmente son los que utilizan el resto de los mortales, porque piensan u opinan que los sistemas automáticos son una utopía.
¿Con cuál de los dos sistemas operas tú habitualmente? ¿Crees que es posible conseguir un sistema de inversión totalmente automatizado?
Las ventajas que presenta un sistema automático respecto a uno manual son: